LAS HUELLAS DE LOS DIOSES

LAS HUELLAS DE LOS DIOSES

¿Qué sentido tiene representar sobre el suelo enormes y enigmáticas figuras que sólo pueden contemplarse en su totalidad "desde el aire"? ¿A quiénes se dirigían estas insólitas señales?.

Las lineas de Nazca, Perú

LAS HUELLAS DE LOS DIOSES

En agosto de 1973 un equipo profesional de fotógrafos consiguió por primera vez imágenes de lo que podrían ser "grandes aeródromos y pistas de aterrizaje de platillos volantes" en la meseta de Nazca. Algunas de las pistas eran tan enormes que alcanzaban de 2 a 8 kilómetros de longitud, y formaban líneas que proseguían paralelamente.

Powels y Bergier, dos entusiastas investigadores que han sorprendido al mundo con más de un descubrimiento sensacional, escribieron con respecto a este problema: "¿Qué significan las figuras de Nazca (costa del Perú), visibles solamente desde un avión o desde un globo, y que la exploración aeronáutica ha permitido descubrir recientemente?. El profesor Mason que, como Verrill, no es sospechoso de fantasías, se pierde en conjeturas. Hubiese sido necesario que las construcciones se guiasen desde un aparato flotando en el cielo".

Atlantes, seres extraterrestres, "platillos volantes", progreso científico...; poco lugares en el globo terráqueo son capaces de codearse en sugerencias con la meseta de Nazca a la hora de ofrecer vestigios de culturas y hechos de nuestros enigmáticos antepasados. El órgano oficial de la UNESCO público hace algún tiempo que el Perú era probablemente uno de los espejos más fidedignos con lo que contaba la humanidad para intentar ver su otra cara. El ejemplo más claro sigue siendo el de las pistas de Nazca.

Los constructores de las extrañas pistas poseían un enorme sentido de la geometría, pues de otro modo no se puede explicar la asombrosa exactitud de unas líneas cuyas desviaciones nunca exceden de los diez segundos de arco. Ni siquiera en el mundo actual, con todos los aparatos de precisión de los que dispone la ciencia moderna, sería fácil repetir esta exactitud casi milimétrica.

Y no es solamente la geometría la que se encuentra total mente dominada en las construcciones de Nazca. También la astronomía se halla representada en grado muy avanzado. El arqueólogo Kosok, según expresó en uno de sus libros, se encontró en Nazca con el mayor tratado de astronomía del mundo. Y aunque el descubrimiento fue debido a la casualidad, no por eso deja de tener menos mérito. La primera pregunta que se planteo el profesor ante el hallazgo fue cómo aprender a leerlo. En un aeroplano realizó varios vuelos de reconocimiento

por toda la región y solamente tras localizar los 12 centros de los que irradiaban las líneas pudo descifrar el enigma. Entonces, sólo entonces, el profesor Kosok pudo formular su teoría sobre uno de los secretos que más celosamente guardaba Nazca: Los centros de las líneas radiales eran puestos de observación, situados casi siempre entre pequeños cerros, donde aún se advierten vestigios de canteras; por lo que se puede deducir que los antiguos pobladores de Nazca no habitaban las llanuras, sino en ciudades situadas a varios kilómetros de distancia. Los grandes cuadriláteros y triángulos sugieren el sitio de reunión de los diversos clanes en los días más ceremoniosos; y las dobles líneas, los caminos rituales que probablemente llevaban a los cementerios. A juicio del investigador, las demás líneas señalaban también los movimientos de otros astros. Una de las cuestiones más apasionantes estriba en poder descubrir exactamente a qué astros corresponden. No habría entonces problemas para deducir por un simple cálculo matemático en qué edad o en que época fueron dibujadas. A título particular, Kosok piensa que los círculo fueron dibujados en un momento en que la primitiva sociedad tribal dio paso a una sociedad más completa cuyas necesidades hicieron posible el uso de ciertos conocimientos astronómicos superiores.

El de Nazca es, en definitiva, otros de los enigmas históricos inexplicados aún por la ciencia moderna. Sobre sus huellas pasaron los conquistadores del Perú sin advertir que tal vez lo hicieran por encima de un misterio insondable.

¿SISTEMA DE OBSERVACION?

Lo más extraordinario que ofrece Nazca son esos trazado sobre el terreno abrupto, en forma de prolongadas pistas, cuyo origen y utilidad no han podido ser explicados. Todo hace pensar que se trata de una gran obra de ingeniería, basada en un sistema geométrico de líneas perfectas y regulares de unos 50 kilómetros de longitud.

De la observación aérea se deduce su funcionalidad, que tiene varios centros que dan origen a superficies radiales en forma de trapecios y triángulos, y todo ello parece responder a un estudio de vías circulatorias, interrumpidas bruscamente.

Estas vías se encuentran delimitadas por mojones de piedra, a modo de indicadores, y son apreciados asimismo unos descomunales dibujos cuyos límites con las grandes surcos del terreno. Hay arañas, diversos tipos de plantas, serpientes, tortugas y un extraño humanoide tocado con una suerte de tierra parecía un disco solar. Todos estos dibujos tienen una se gunda reproducción, a escala menor, en otro poblado de Nazca, en la barranca denominada del Puquio. Arqueólogos autorizados han querido ver en las pista de Nazca, como hemos señalado, un sistema de observación astronómica, ideado para seguir la trayectoria de los astros y de los planetas. También existe la opinión de que tales trazos tendrían un uso extraterrenal, tal vez relacionado con la creencia de que los dioses llegaban desde el cielo... Lo que nadie apunta es cómo se realizaron esas pistas y enormes dibujos sobre el suelo, aunque se sostenga la versión de que son obras de razas civilizadas desconocidas.

En la mitología indígena recogida por los descubridores de América hay relatos comunes en relación al origen de los dioses; de ello se deduce que dominaban el espacio y las profundidades marinas, así como que disponían a su antojo de la fuerza de la Naturaleza. Para sus desplazamientos, empleaban "carros" de fuego, cuando no usaban sus propias alas para trasladarse velozmente de un lugar a otro de la tierra. Y eran, además, espíritus...

Y estos, dioses o espíritus, trataban de imitar a todos los hechiceros de tribus y ciudades bien distintas, pero no exclusivamente, ni mucho menos, en América. Los adornos alados de los personajes mexicanos, como los de los pieles rojas o los indios del centro y sur del Nuevo Mundo, se pueden rastrear en Africa, Asia y Oceanía, en el Antiguo Egipto y Mesopotamia. En todos estos lugares, el uso del plumaje en los magos tenía el mismo significado: la posibilidad de volar, a imagen y semejanza de los dioses.

PISCO: EL DESAFIO DEL TRIDENTE

En Pisco, situado frente a una recoleta bahía, existe un impresionante vestigio de la cultura maya. Se trata de un dibujo en relieve de casi 250 metros de extensión, que se eleva suavemente ladera arriba y que se parece a un tridente o un candelabro, formas con la que es conocido en todo el mundo, dando cuerpo a otro enigma indescifrado. Las especulaciones acerca de su funcionalidad son tan variadas como autores se han ocupado del relieve de Pisco; todos sin embargo, coinciden al afirmar que fue trazado para ser observado desde lejos, y desde lo alto, como si hubiera de servir a hipotéticos viajeros del espacio. ¿Acaso los dioses, venían invariablemente del cielo?

Dibujo o ideograma, el candelabro o tridente requiere, para su ejecución sobre el terreno, un trabajo material en perspectiva, pues a simple vista y sobre el suelo, la silueta del trazado no pasa de ser una incisión tosca, pero de muy difícil realización sin esa perspectiva aérea.

Esta extensa representación en relieve se encuentra como a dos centenares de kilómetros de distancia de Nazca, de cuyas pistas y dibujos sobre el terreno ya hemos hablado. No es descabellado pensar, por tanto, en una relación entre las pistas de Nazca y el tridente o candelabro de Pisco, perteneciente a una cultura común o muy próxima. Cerca de la bahía se han encontrado restos de zonas urbanas y murallas de adobe; las cerámicas tienen el mismo sello del estilo Tiahuanaco, con variaciones Ica, materiales que indican la existencia de una raíz común a estas huellas culturales, aunque de finalidad diferenciada. Todo hace indicar que el candelabro o tridente de los andes era el símbolo de una ciudad, trazado ideográficamente para ser visto desde muy lejos. No hay que olvidar que los valles de Chinca, Pisco, Ica y Nazca fueron cuna de lo que más tarde sería Imperio Inca, donde surgió una de las corrientes de mayor fuerza social de esta parte de América, que se impuso por la fuerza de las armas a muchos pueblos pequeños, sin defensa organizada y de vida sencilla.

Pisco, dedicados a sus pobladores primitivos a la pesca fundamental mente, fue fácil a pesar de los guerreros incaicos, que probablemente los hicieron esclavos de forma masiva y llevados lejos de su suelo patrio. El tridente, símbolo marino por excelencia, quedó intacto sobre la tierra, testigo mudo por los siglos venideros de la existencia de hombres y mujeres dotados de gran sensibilidad.

Un gran tridente, o un gran candelabro, de 250 metros de altura. grabado en la roca. Imposible no verlos, desde unos 20 kilómetros, señalando la bahía de Pisco, a quien venga desde el océano a bordo de un o navegando.

Una vez más el rostro enigmático del antiquísimo Perú desafiando nuestra capacidad de compresión y dando rienda suelta a todo un torbellino de hipótesis. Para Erich von Däniken se trata de una señal-guía relacionada con el "cosmódromo y aeródromo" de Nazca que atribuye a los extraterrestres, donde también hay dibujos gigantescos visibles desde lo alto.

Un candelabro o tridente de 250 metros de altura grabado en la roca. ¿Por qué precisamente esa figura? Qué es: ¿un dibujo, un ideograma o una letra alfabética? Y sobre todo, ¿quiénes y para qué grabaron a tamaño descomunal esa inscripción en ese lugar precisamente?

¿COMO LOS HICIERON?

Enigma sobre enigma, carecemos actualmente de datos para identificar a los misteriosos "dibujantes" de los ande; no sabemos quiénes fueron, ni cuándo llevaron a cabo su prodigio; tampoco sabemos la finalidad de las extrañísimas figuras (aunque sospechemos que se trata de "mensajes") y, sobre todo, desconocemos cómo fueron capaces de trazar sobre el terreno unos dibujos cuya perspectiva sólo es posible calibrar desde el aire, y a una altura -dada la longitud de los trazados nunca inferior de los 200 metros. La explicación más lógica es, aparentemente, la más absurda: emplearon algún tipo de naves aéreas.